Las violaciones son una lacra global. Se estima que una de cada cinco mujeres se enfrentará a una violación o a un intento de violación en su vida. La verdad se esconde en los millones de violaciones sin resolver que no se pueden demostrar por la ausencia de pruebas, la primera de ellas siendo el rastro de semen. Según RAINN, de cada 1000 agresiones sexuales, solo 4,6 violadores irán a la cárcel.

El personal la escena del crimen y del laboratorio forense suele enfrentar la difícil tarea de localizar las trazas de semen en las pruebas y en el escenario en un breve período de tiempo.

La bibliografía científica coincide en que el uso extendido de fuentes de luz alternativas hace que sean poco específicas (falsos positivos) e insensibles (falsos negativos).

En ocasiones se estima que el 30 % de las manchas de semen no las detectan las fuentes de luz alternativas disponibles en el mercado. Las pruebas puntuales de fosfatasa ácida, aunque son más sensibles y específicas, utilizan reactivos que pueden resultar cancerígenos para el usuario, toman demasiado tiempo, requieren mezclas preparadas en el laboratorio y suelen provocar problemas de reubicación y muestreo erróneo.

Tras años de investigación en colaboración con la Policía Científica francesa (SNPS, por sus siglas en francés), AXO Science pone ahora a disposición de los expertos forenses la tecnología Sperm Tracker, que mejora tanto la sensibilidad como la especificidad de la detección de semen y ofrece muchas ventajas a los expertos de los laboratorios forenses y a la policía científica para la detección de manchas de semen.